Empezamos nuestro camino transformando esta antigua casa de labradores en una pequeña churrasquería, que poco después se convertiría en tapería, y que gracias a la fidelidad de nuestros clientes, haría que siguiésemos por esta senda a lo largo de más de 40 años.
El restaurante está fuertemente ligado al nacimiento de nuestro primer hijo, Junio de 1979. Un mes más tarde abríamos nuestras puertas con el nombre de “Xanxo”, nombre con el cual en aquella época no se nos permitió registrar a nuestro hijo, por lo decidimos ponérselo al Restaurante y cosas de la vida es él quien está al frente ahora, Xanxo.
Hemos pasado por diferentes reformas a lo largo de 4 décadas, pero siempre conservando la esencia de esta casa familiar. Donde hoy tenemos el comedor interior, se situaban las cuadras de la casa, y en el patio todavía se conserva una pila antigua. En el “albollo” tenemos una prensa que se utilizaba para hacer vino, fruto de esa parra de mas de 200 años que hoy en día sirve para dar sombra a nuestro patio en los días de verano.
Nuestro camino a día de hoy es seguir ofreciendo a nuestros clientes esas recetas familiares que Rosalía aprendió de su madre, “María de Marica”, y hacerles sentir que esta también es su casa.
